lunes, 15 de febrero de 2010

Días decisivos

El sueño puede conmigo... pero por mucho que me moleste, he de ir.
Ya me sé el camino... todos los días es absolutamente el mismo.
Con los ojos entrecerrados muevo los pies lentamente, sin ninguna gana,
sin intención de seguir, pero obligada ya por la inercia de la costumbre...
y eso que hoy no es un día cualquiera. El camino hacia el metro es el mismo,
pero  en su interior las líneas de colores se enredan y entrecruzan de un modo
complicado y enrevesado que me confunden en este sopor mañanero...

Y cada vez todo se complica mas... porque yo debería estar muy nerviosa,  pero en vez
de preocuparme me dedico a disfrutar de el aire que roza la piel de mis hombros
entrando por la puerta del transporte subterráneo, y aspirándo el olor de todos
los acicalados rociados de perfume.

Podría morirme de la angustia, mantener la mente nublada y confusa, pero creo que no me
merece la pena... ¿para qué? Lo hecho, hecho está.

Al fin y al cabo, no pasa nada, son las ocho de la mañana y a partir de las nueve se decidirá parte de mi futuro... pero bueno, siempre he oido decir que, realmente  el futuro de alguien se determina por los hecho que acontecen... sean buenos o malos en apariencia... ¿Qué pasaría si las cosas no salen como debieran supuestamente? Quizá no sería un drama... y me ayudaría a decidir si realmente quiero hacer lo que se supone que quiero hacer... quién sabe, si ni siquiera yo lo sé...

Esos tres días decisivos....

sábado, 13 de febrero de 2010

Sol


Sol, tú  que irradias a todos tus hijos,
que les das calor, enrgía y cobijo
entre tu cálida sábana;

Tú, que eres centro de un sistema,
centro de la exitencia,
tú que existes y has contemplado
todo lo que a mí me queda por dar;

Tú que concentras ardiendo
tanto átomo candente en movimiento
y que alimentas sin esfuerzo...
Tú que quemas...

Quémame el alma, las intenciones,
las pasiones, porque harta estoy
de sufrir entre mares de hielo,
insolencia, ignorancia y además
todos mis desvelos.

Arránca con crueldad la rabia
de mi ser y elimina todo rastro
de absurda necesidad,
que solo quiero vivir,
porque ya no puedo amar.

viernes, 12 de febrero de 2010

levitando


Ya no sé que pensar...
porque el pensamiento
se deshace entre los sueños
de lo inimaginable
y lo ininteligible...

Se esfuma entre las
redes de lo inexistente
y entre gente que me rodea,
como la seda se esparce
y cubre mil cabezas...

la verdad es que no entiendo
porque quiero soñar,
si cuando pienso en ti
sólo puedo levitar...
pero esa distancia...
se pierde, se esfuma,
entre lo inexistente,
lo inimaginable,
lo que no ocurre,
y lo que puede ocurrir...

jueves, 4 de febrero de 2010

ojos,sonrisa y sueños...

Despierto, los ojos abiertos...
la mente dormida
y el sueño pendiente

Sonrío, los dientes presentes...
los labios candentes
y el sentimiento ausente

te miro, los ojos abiertos...
la mente despierta
y mi sueño presente.